Casi a fines de febrero, después de añorar salir del largo encierro por el Covid-19, partimos con mi familia una semana de vacaciones al sur de Chile, donde vive mi hijo mayor. Es en el sur donde logro encontrar el descanso y la desconexión. Tenía una enorme necesidad de conectarme con la naturaleza, ver a mi familia y recorrer como siempre lo hacíamos lugares donde la belleza de lo natural impacta y llena de energía.
En Puerto Varas, ciudad donde alojamos en la Región de Los Lagos, mi hijo hizo de guía, ya que tiene un amplio conocimiento de la zona. Tomamos el camino en dirección a la costa hacia Hueyusca, para conocer las maravillosas playas del sur de Chile, específicamente las de la zona costera del océano Pacífico, con caminos duros y de difícil acceso (solo vehículos 4x4).
CALETA SAN PEDRO
La ruta se hace pasando por bosques de alerce milenarios (quemados a principios del siglo pasado por errores de manejo), coihues, arrayanes, selva valdiviana, copihues, helechos gigantes y nalcas. Son aproximadamente tres horas de viaje, en las que ir parando a tomar fotos se vuelve una obligación. Si además el día está despejado, mejor aún, porque los colores son más nítidos. El silencio y el viento que golpea las hojas de los árboles hacen de esta una experiencia riquísima.
Los caminos interiores se van abriendo hacia la costa hasta llegar a Bahía San Pedro. Una bifurcación a la izquierda lleva a Caleta San Pedro y a la derecha a Caleta San Carlos y Manquemapu. Luego de bajar por una fuerte pendiente, con un camino difícil y sinuoso, las ansias de ver el paisaje del mar aumentan. Al fin aparece el río Hueyusca, el cual va serpenteando entre cerros selváticos y acantilados.
Finalmente llegamos a Caleta San Pedro, un lugar con una playa de arena gruesa y blanca, de aguas muy tranquilas y frías. Este lugar es ideal para relajarse y disfrutar de la vista del mar, río y cerros. Se puede caminar por la playa, pescar en el río y en el mar, y hacer trekking. Esta playa está inserta en un pequeño trozo de tierra. Aquí hay solo una cocinería, donde no siempre se puede comer, por lo que es recomendable llevar algo de comida para aguantar si el día se hace largo.
CALETA SAN CARLOS
Seguimos el recorrido por la costa para conocer más de estas playas del sur de Chile y nos vamos a Caleta San Carlos. Para eso debemos subir hasta la cumbre nuevamente para tomar ahora a la izquierda. Recorremos durante unos 30 minutos increíbles paisajes y angostos caminos que son toda una aventura, llenos de acantilados y una vista magnífica del mar.
En esta caleta hay varios paseos que se pueden hacer por el día. El más cotizado es a las pingüineras, loberas y catedrales de Manquepamu. Este es un tour que se hace por el mar y dura aproximadamente una hora y media, dependiendo del estado de las mareas. Como referencia, el valor del tour es de $20.000 por persona.
En San Carlos no hay donde alojar ni comer, es un caserío de unas pocas casas. Un par de kilómetros más adelante, con una constante subida y bajada, nos detenemos en un mirador con una amplia vista de la costa que, además, conmemora un triste hecho en la historia contemporánea de la zona y de nuestro país: el naufragio de dos embarcaciones de la Armada de Chile acaecido en agosto de 1965, que causó la muerte de unos 50 marineros. En la playa de Manquemapu aún quedan algunos vestigios de una de las naves, con lo cual la tragedia se conserva bien viva en el recuerdo de sus habitantes.
MANQUEMAPU
Seguimos por el camino costero de esta zona de la Región de Los Lagos y tras otros 30 minutos llegamos a Manquemapu (que significa “Tierra de Cóndores” en mapudungún). Otro increíble lugar, más poblado, donde desemboca el río Lliuco.
La Reserva Costera Manquemapu es un parque indígena que forma parte de la Reserva Williche Mapu Lahual, uno de los centros de diversidad biológica de mayor importancia del mundo según la ONU. En esta playa hay mucho que visitar: están las catedrales de Manquemapu, El Galpón y El Campanario, islotes y formaciones rocosas en medio del mar. Este tour sale solo desde Caleta San Carlos, pero también se pueden ver estos atractivos desde tierra firme.
Si quieres probar comida casera con una vista impresionante, hay que ir a La Casa de la Montaña, un lugar rústico a cinco minutos por el camino hacia el sur. Aquí existe un sendero que baja hasta las playas. Se recorre en aproximadamente 20 minutos y requiere tener un buen estado físico.
Es un camino que se hace pasando por miradores donde se aprecian ambas rocas gigantes y que llega a Playa Escondida y Playa de Cuarzo. En esta última existe una cueva indígena. El río Lluica desemboca en esta caleta. Aquí se pueden hacer paseos en kayak, con un valor de $8.000 por persona.
Manquemapu es conocido porque aquí todos los años en febrero se hace el Festival Nómade de música electrónica (menos este año 2021 por la pandemia). Dura una semana y la música comienza todos los días a las 16:00 horas y termina a las 7:00 horas. El alojamiento se puede hacer en camping o en cabañas de familias huilliches locales.
Se puede recorrer la zona por el día, es largo pero vale la pena. Siempre uno queda con ganas de permanecer más tiempo y disfrutar de cada una de las experiencias que nos brinda esta linda costa y playas del sur de Chile. Lo ideal para unas vacaciones es ir por dos noches para impregnarse de estos lugares maravillosos de la Región de Los Lagos.
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SUR DE CHILE: DATOS DE VIAJE
- Transporte: No hay gasolineras en el recorrido. La última estación de servicio está en Purranque.
- Dónde alojar: hay un camping en las inmediaciones de Caleta San Carlos y en Manquemapu. Cabañas hay muy pocas. No hay dificultades para ubicar una camper con el consentimiento previo de los habitantes y/o propietarios del lugar. En San Pedro suelen cobrar según la zona elegida.
- Dónde comer: en la zona no hay restaurantes, solo comida de casa y camping, por lo que recomiendo llevar algo si el paseo es por el día.
- Temporada: La mejor época del año para recorrer este sector es en verano, aunque se puede ir todo el año en vehículos acondicionados.
- Ropa adecuada: zapatos de trekking, parka o cortaviento, y pañuelo o bandana. Es recomendable viajar equipados con ropa de abrigo e impermeable en toda época. Los zapatos deben ser también impermeables y adecuados para senderos con barro y sectores inundados.
- Clima: húmedo y frío la mayor parte del año. La temperatura promedio anual es de 10°Celsius, con mínimas de -3°Celsius en invierno y máximas de hasta 25°Celsius en verano. Las precipitaciones son abundantes, sobre 3.000 milímetros anuales, y aunque se concentran entre abril y noviembre, siguen siendo comunes en verano.
